Nuestra Nutrición es algo que nos afecta todos los días. Desde nuestra energía durante el día, hasta cómo dormimos, es importante mantener una dieta saludable, que nos ayude a optimizar todos los aspectos de nuestra vida diaria.
En este artículo, vamos a hablar sobre los diferentes tipos de nutrientes, ¿Qué tanto debemos de comer? ¿Cómo mantenernos? y diferentes tipos de dietas.
Primero, debemos describir los nutrientes que están en nuestra comida. La mayoría de la comida es una combinación de 3 macronutrientes: Carbohidratos, Proteínas y Grasas.
Nuestra dieta diaria debe ser variada y procurar un balance en nuestros alimentos, de la siguiente manera: 50% Carbohidratos, 35% Proteínas, y 15% Grasas. Se puede comer más proteína si uno quiere, pero la proporción de carbohidratos y grasas no debe de subir más de estos porcentajes. Elegir las comidas naturales y evitar comidas procesadas, incorporar a nuestra dieta diaria un mayor número de frutas y verduras.
Segundo, cuando se trata de la cantidad de comida, cada persona requiere una cantidad diferente de calorías en proporción a su peso, sexo, altura y edad. Las autoridades de salud recomiendan una dieta de 2000 calorías al día, que es la unidad de medida de la energía.
Este se calcula usando las siguientes ecuaciones:
Para hombres: Calorías diarias = 10(Peso en kg) + 6.25(Altura en cm) – 5(edad) + 5
Para mujeres: Calorías diarias = 10(Peso en kg) + 6.25(altura en cm) – 5(edad) – 161
Aplicando esta base, podemos calcular la cantidad de calorías que necesitamos al día. Si uno hace ejercicio o realiza un trabajo laborioso, se agregan las calorías que se gastan. Esta es la cantidad para mantener nuestro peso, pero si queremos bajar o subir de peso, hay que modificar la cantidad de calorías que consumimos.
Se recomienda que si uno quiere bajar de peso, uno debe de comer 500 calorías menos por día. Como referencia, hay aproximadamente 3,500 calorías en medio kilogramo de grasa en el cuerpo. Esto significa que si uno come 500 calorías menos cada día, baja medio kilogramo cada semana.
En general, dietas excesivamente restrictivas no son sostenibles y pueden dañar la salud.