El ejercicio es un aspecto fundamental para mantener una buena salud. Estudios han reconocido que el ejercicio ayuda en varios aspectos: fisiológicamente, al sistema cardiovascular, a prevenir condiciones como la diabetes, y también con nuestra salud mental.
Pero con tanta información, a veces es difícil saber ¿Qué tanto ejercicio se necesita? ¿De qué tipo?
El instituto nacional de salud recomienda que adultos completen 150 minutos de ejercicio moderado cada semana o 75 minutos de ejercicio intenso cada semana.
El nivel de ejercicio se calcula usando el ritmo cardíaco: el ritmo máximo de una persona se calcula como 220 – la edad de la persona. Por ejemplo, si uno tiene 40 años de edad, su ritmo máximo es 180 latidos por minuto.
Ejercicio moderado se define entre 50-70% del ritmo máximo, y ejercicio intenso como 70-85%.
Cuando se trata de tipos de ejercicio, se reconocen 2 tipos principales: el entrenamiento aeróbico, y el entrenamiento de fuerza. El ejercicio aeróbico pertenece a movimientos que estimulan el sistema cardiovascular, como: correr, nadar o ir en bicicleta. Así mismo, el entrenamiento de fuerza es aquel donde utilizas pesas o el peso del cuerpo, para estimular músculos individuales.
Se recomienda que tengamos una mezcla de los dos tipos para maximizar los beneficios. Por ejemplo, si uno tiene riesgo cardiovascular, aunque sería bueno que esa persona estuviera haciendo ejercicio de fuerza, le conviene más hacer ejercicio aeróbico por los beneficios del corazón.
A veces es difícil encontrar tiempo para hacer ejercicio y los médicos entienden que 150 minutos es mucho tiempo también. Algunas actividades básicas generan buenos beneficios, tales como: tomar las escaleras en vez de tomar el elevador.
Es difícil empezar una rutina de ejercicio, pero cuando ya se empieza, los beneficios son casi infinitos.
prueba
prueba a